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Hallan cadáveres de madereros en Junín
Los ocho cuerpos encontrados tienen impactos de balas de escopeta. Jefe asháninka negó matanza.
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La Policía logró identificar a dos de los siete madereros que fueron asesinados el último jueves por nativos asháninkas, quienes les habrían disparado con escopetas cuando ingresaron a sus territorios, en el sector de Selva de Oro, ubicado en Tsomaveni, en el distrito de Pangoa. Se trata de Emanuel Vásquez Paredes (32) y de Juan Masa. Este habría contratado a un grupo de 10 personas para colonizar tierras rurales.
Según la denuncia presentada ante la Primera Fiscalía Provincial Mixta de Ayna-San Francisco, que despacha Ricardo Mendoza Pareja, los jóvenes Imer Umar Castro Piñango (26) y Ever Joel Gutiérrez Rúa (21), que formaban parte del grupo, lograron escapar e informaron de la matanza a Marco Vásquez Yamunaqué, padre de una de las víctimas.
De acuerdo con la versión de los testigos, Masa los contrató para ocupar tierras vírgenes y realizar cultivos agrícolas en la comunidad de Tsomaveni, la cual forma parte del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM). Sin embargo, los miembros de la comunidad nativa, al sorprenderlos en plena actividad, repelieron la incursión en forma desmedida pues usaron escopetas para matar a mansalva a siete de los 11 colonizadores.
El alcalde delegado de Selva de Oro, William Zanabria Páucar, informó a la Policía del hallazgo en la zona de ocho cadáveres de madereros en avanzado estado de putrefacción y que fueron identificados como Juan Maza Troya, Emanuel Velásquez Paredes, Sandro Cuya Ccente, Orlando Mendoza Chocce, Felipe Prado Palomino, Milán Sonco Sacaca, Ricardo Paraguay y un joven de nombre Jaime.
Al respecto, Canal N detalló que los cuerpos tienen impactos de escopeta y se está a la espera de un representante del Ministerio Público.
ASHÁNINKAS NIEGAN MATANZAPor su parte, Mario Flores Chirisente, presidente de la unión indígena de las comunidades nativas de Pangoa, Satipo, negó que los autores del crimen sean miembros de la comunidad.
Sostuvo que la zona donde ocurrieron los hechos queda bastante lejos y que el lugar es un sector de intensa actividad del narcotráfico y sembríos de coca.
DATO
- El caso viene siendo investigado por la Segunda Fiscalía Mixta Provincial de Satipo y por la División de Investigación Criminal de Mazamari.
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