El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, brindó este lunes su última conferencia de prensa como jefe de Estado. A partir de la medianoche, AMLO será expresidente y horas más tarde, este 1 de octubre, juramentará Claudia Sheimbaum como su sucesora.
Durante la conferencia, el mandatario mexicano se despidió de los periodistas y promulgó la polémica reforma constitucional que integra la Guardia Nacional, creada por AMLO en 2019, a la Secretaría de la Defensa Nacional, a pesar de que inicialmente prometió que se mantendría a cargo de civiles.
Asimismo, el jefe de Estado también firmó la reforma constitucional que reconoce los derechos de los pueblos indígenas. Ambas reformas fueron aprobadas por el Congreso y son las últimas normas que firma López Obrador.
"Yo quiero para terminar firmar aquí frente a ustedes las publicaciones de dos reformas constitucionales de las 20 iniciativas de reforma que envié al Congreso", indicó.
La primera reforma ha sido cuestionada por la oposición, así como organizaciones civiles y organizaciones no gubernamentales, quienes aseguran que se busca implantar una "militarización", debido a que la reforma cede la Guardia Nacional al Ejército.
"Se logró con esta reforma que [la Guardia Nacional] pase a formar parte de la Secretaría de la Defensa Nacional, lo cual le va a dar solidez, permanencia, disciplina y manejo honesto, sobre todo el que no se vincule a la delincuencia organizada ni a la delincuencia de cuello blanco", dijo.
Por otra parte, la segunda reforma reconoce a 68 pueblos originarios como sujetos de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio. Asimismo, declara como "nación multiétnica" a México.
Rifó su reloj
Durante la conferencia, que tuvo desayuno incluido, se instaló una tómbola en la que periodistas participaron para ganar el reloj de López Obrador: "Bueno, pues agradecerles mucho por participar en estas conferencias durante casi seis años. Este diálogo circular que hoy concluye. Me da muchísimo gusto que continúe este ejercicio de auténtica comunicación de mensajes de ida y vuelta, como lo ofreció la presidenta electa Claudia Sheinbaum. No puedo dejar de decir que me voy muy satisfecho por el cariño de muchos mexicanos, mujeres, hombres cosa que agradezco de todo corazón".
El jefe de Estado tendrá un almuerzo con los otros dignatarios que asistirán mañana a la asunción de Claudia Sheinbaum. No obstante, López Obrador ha sido cuestionado por invitar a los dictadores de Cuba y Venezuela, Miguel Díaz Canel y Nicolás Maduro, quien no acudirá. Asimismo, también se extendió invitación al presidente de Rusia, Vladimir Putin, sobre quien pesa una orden de arresto de la Corte Penal Internacional.
Alta popularidad
López Obrador dejará el poder con una popularidad cercana al 80%, de acuerdo al diario español El País. 77% de los mexicanos aprueban su gestión, frente al 23% que la desaprueba. Quienes más lo apoyan son mujeres (78%), personas mayores de 65 años (87%) y los menores de 34 años (cerca a 80%).
La presidente electa Claudia Sheinbaum cuenta con una aprobación de 74%, frente al 19% que la desaprueba.
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