[Editorial]: Elitismo municipal

“La viceministra Elizabeth Añaños ha pedido una reunión con el alcalde, pues se trata de una norma inocultablemente discriminatoria”

Editorial Perú21

Fecha Actualización

03/07/2021 - 07:00

Extrañeza, por decir lo menos, causó la ordenanza municipal 2361, promulgada por el alcalde de Lima Metropolitana, Jorge Muñoz, que regula la ejecución de proyectos de vivienda de interés social en Lima. La medida, que además bloquea en la práctica la construcción de viviendas o edificaciones de bajo costo en distritos como Miraflores, La Molina, San Borja y San Isidro fue criticada con dureza por los especialistas y hasta por el Ejecutivo.

El propio Ministerio de Vivienda y Construcción expresó su disconformidad y la viceministra Elizabeth Añaños ha pedido una reunión con el alcalde, pues se trata de una norma inocultablemente discriminatoria, como también se le advirtió en la sesión del concejo municipal, sin lograr disuadir a Muñoz de su decisión.

El alcalde justificó la ordenanza alegando que muchas constructoras presentan sus proyectos en esos distritos como de viviendas sociales –acogiéndose así a ciertos beneficios que permite la normativa–, pero las venden a un alto precio, ya que allí el costo del suelo es elevado. “Lo que hacemos es sincerar las cosas. Cerramos el paso a las inmobiliarias que quieren hacer estas obras con precios (que no corresponden)”

Sin embargo, se han alzado voces que condenan enérgicamente la decisión edilicia, como la del exministro de Vivienda Carlos Bruce: “Están prohibiendo las viviendas sociales en distritos específicos, eso suena horrible. Es tremendamente discriminatorio lo que ha aprobado la Municipalidad. Solo porque unas constructoras hicieron algo indebido, las familias que lo necesitan se han quedado sin vivienda en ocho distritos. Es una medida extrema, no tiene sentido y es inconstitucional”

Si bien el problema es real –inmobiliarias que desarrollan proyectos supuestamente sociales que luego son vendidos según los estándares de la zona– la solución que le ha dado el alcalde Muñoz no parece ser la más adecuada. Convendría que escuchase la opinión de los expertos, pues tal como ha sido presentada, es explicable el unánime rechazo que ha generado.

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