¿Por qué casi todos callan con Expreso?

Primer acto: Beto Ortiz formula unas explosivas declaraciones a Expreso, el diario más opositor. Beto sostiene que Vizcarra acabará preso tras su gobierno, que mucha prensa se pasa de waripolera y que estas elecciones congresales eran una estupidez. La entrevista pasa relativamente desapercibida (sin “rebotes”), tapada por las elecciones y también porque tanto Expreso y Beto han coleccionado, como yo, muchos enemigos. Segundo acto: a los pocos días, fiscales y 40 policías allanan estrepitosamente la vivienda de la editora de la sección de Política de Expreso, dizque para recoger unos videos de una cámara que habría registrado un atraco... Qué raro, ¿no? ¿Toda esa movilización no parece un amedrentamiento clásico, el vuelto? ¡Y si no lo fue, igual hay que pitear, por si acaso! Tercer acto: salvo el reclamo de Perú21 (y mucho después IPYS), un silencio sepulcral en el resto de los medios. Tampoco el defensor del Pueblo, el Consejo de la Prensa, el IDL, los tuiteritos o las ONG se habían manifestado al momento de escribir estas líneas. Tal vez Beto acertó cuando afirmó que “conforme el régimen se endurezca vamos a tener menos margen para la opinión disidente”.

-Vecinito, este servidor macho patriarcal heterosexual caucásico escribió a favor del matrimonio y de la adopción gay en el editorial de Correo hace ya muchaaaas lunas. Y sin ser “progre”, sino por liberal, cuando hacerlo era suicida. Muchos de tus coleguitas “progres” entonces me tildaron de “maricón”. Ricordate, Italia, ricordate, decía Fellini…

-Ayer Elmer Cuba tildó de “derecha” al caviarazo Partido Morado. ¡Igualito de perdido que cuando avaló la construcción de la refinería de Talara con una consultoría!

PD: JPP y el llorón de Arbizu no entraron al Congreso… ¡Éxtasis, apoteosis, épico, euforia, delirio, orgasmo!