Maduro y la oposición en Venezuela

Mientras que Nicolás Maduro acaba de confirmar el fracaso económico de su gobierno, ¿qué acciones está tomando la oposición venezolana para beneficiarse de esta situación? Por ahora, solo una parte organizada alrededor del recientemente creado Frente Amplio se encuentra impulsando una huelga nacional, nada más.

Uno de los grandes problemas para sacar a Maduro del poder es la existencia de una oposición dividida y poco conectada con los sectores populares. En las últimas elecciones (tanto en las regionales como presidenciales), parte de la oposición aceptó participar del juego del oficialismo impidiendo cualquier intento de “causa común”.

De ahí que la presión internacional –a través del Grupo de Lima, buscando desestabilizar al gobierno de Maduro mediante la aplicación de la Carta Democrática Interamericana de la OEA o promoviendo sanciones de EE.UU. y la Unión Europea– no va a tener ningún impacto si no se da un levantamiento social que cuestione las estructuras internas del poder en Venezuela. Muchos consideran que esto se va a dar inexorablemente –el aún presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, habla de un régimen que está a punto de colapsar–. Mientras tanto, el chavismo ya tiene casi 20 años en el poder.

Cabe señalar que Venezuela aún se sostiene gracias al financiamiento y los recursos que le proveen potencias como China y Rusia. No obstante, China ha ido reduciendo sus préstamos frente a las dificultades de Venezuela de cumplir sus compromisos, mientras que la alianza con Rusia depende en gran medida de la relación que el gigante euroasiático construya con EE.UU., por lo que en este ámbito pueden darse cambios en el corto plazo que la oposición venezolana podría no estar preparada para aprovechar.